jueves, 8 de enero de 2009

Adios Rosario...Hola San Rafael



No hay Olimpíadas “No Inmortalizables”. Algo, lo que sea, las convierte en “para toda la vida”. Aunque Rosario ya haya pasado, no faltará reunión donde se resucite el clásico anual de las Olimpíadas Rosarinas. Hoy, más de dos meses después, el fantasma de la tierra de Alberto Olmedo, El negro Fontanarrosa, el Che o Fito Páez, sigue apareciéndose en cada cabeza nostálgica y posiblemente acampe por ahí para no irse más.





Asi quedó Rosario...Patas para arriba!






Comenzamos por destacar que se trataron de Olimpíadas “Regionales”, por lo que el cupo de provincias participantes se redujo a un sector del mapa de la República. No intervinieron ni los “esquimales” de Tierra del Fuego, ni los “entonados” Mendocinos (Aunque algunos brindaran en su honor), y mucho menos los de La Paz, porque ahora que me fijo, son de otro país.

Desde el martes 28 de Octubre, deportistas de todas las disciplinas comenzaron a alunizar (¿?¿) en la provincia transportados en infinidad de autos que lo único que lograron fue trasladar los problemas de tránsito de Capital a Rosario. Del grupo de conductores designados hubo uno/a que se destacó por encima del resto. “Yo aprendí hace poco a manejar…¿¿¿Quien viene conmigo???” dijo la chica sin filtro oral (malpensados abstenerse). Nadie se animó a levantar la mano. Si se podía elegir auto, ¿para que arriesgarse?. Llegó un momento en que ya no hubo posibilidad de elección y algunos cayeron, contra su voluntad, en el temible automóvil. Si están esperando ver sangre, no van a tener suerte. El auto, al igual que el resto, llegó sano y salvo.





¿¿Alguno vienen conmigo?? ¡Estreno carnet de Conducir!




La fiesta inaugural, marchaba tranquila y sobria hasta que anunciaron el “Show que cambiará el mundo”…y ahí aparecieron ellos…Los Lumbrices…con un show tan largo como tétrico/decadente, donde lo único que no hubo fueron risas. Lo más divertido del show sucedió cuando un muchacho “XXL – Super Maxi”, con suficiente alcohol en sangre como para arder en cuanto se encendiera algún cigarrillo en un radio de dos metros de cercanía, se prendió en un diálogo con uno de los 4 ¿Showmans? Lumbrices.

Estos muchachos cuando observaron que no podían lograr ni una sonrisa en el público, atacaron con bromas agresivas, demostrando su capacidad de adaptación, aunque no su buen tacto. Después, más de lo mismo o peor. Uno de ellos amagó con alguna imitación, para después literalmente irse corriendo del escenario y no volver por un largo rato. Para entonces, en interminable show estaba en su momento más bajo y en el salón solo quedaba un tercio del público inicial. Nada de irse retirando con sutileza y de a poco. Grupos y grupos de deportistas se levantaban de sus asientos al grito de “Nos Vamos!!” a ver si los ¿Humoristas? entendían el mensaje, pero ni el mago "Adivinosky", su personaje más nefasto, podía revertir la situación. Llegó el momento de irse, sin saber como terminó la cosa y también sin importarnos demasiado.





No puedo dar muchos detalles de lo sucedido en el Hotel donde se alojaba la delegación de natación, ya que me encontraba en otro Hotel del mismo grupo, pero por lo que cuentan, el Delfín Fernando dejó apenas las espinas del bicho que se comió (¡¡hay fotos!!) el jueves a la noche.





Si no viene Mendoza igual brindamos en su honor...




Viernes por la mañana, el gran día esperado había llegado. Un grupo nutrido de nadadores con camisetas blancas se acercó a uno de los centros natatorios de Rosario, para comenzar la cruzada Olímpica. De entrada nos recibió un flaco, desgarbado, de pelo largo y barba que tenía pinta de Bíblico. Varios de persignaron en su presencia, por las dudas. Otros no, por un tema de creencias.

En 6 (¿?) minutos vimos como el tipo puso los andaniveles, conectó los parlantes, completó las planillas, multiplicó los pebetes (¿?¿¿) y nos bendijo (¿?). El 7mo minuto descansó. La pulsera con las iniciales JC complicaban más la cosa.




Che, a Barba lo tengo de algún lado...¿No es la segunda vez que viene?




¡¡¡Largaron!!!
Antes aclarar que la mayor dificultad que tenía la piscina eran los rayos de sol que ingresaban por una ventana del globo y pegaban casi verticalmente en el agua, justo en el borde donde se realizaba la “americana”, por lo que la vuelta se hacía a tanteo y era muy común encontrarse con el costado azul de la pileta cuando la cara estaba a centímetros del borde.

Después fue todo un despelote vertiginoso de largadas y llegadas que hizo todo más entretenido. Cuando te nombraban por altoparlantes no sabías si era para la próxima competencia o para la que acababas de correr. No hubo tiempo para aburrirse. Muchos podios exclusivos de CABA, avalados por una tabla de posiciones que mostraba a las claras la superioridad. Otros podios donde había mechado algún infiltrado de otra provincia, como mosca en la sopa. El destapado, el joven Oliva, que hizo saltar la banca medallera.

No faltaron las fotos promocionales con todos los competidores.
Entrega de premios con la misma velocidad que se corrían las competencias y al hotel, para prepararse para la segunda jornada, al otro día. Yo, a cambiar el Chip, y ponerme el futbolero porque a la tarde tenía un partido fundamental con los Anfitriones, nada menos que en su casa.





Las porristas deleitan a la Tribuna Masculina




Ese mismo viernes por la noche, fiesta con derecho de Admisión (donde sólo ingresaban los del Consejo de CABA), que superó las expectativas y también la capacidad del lugar.
El espectáculo de humor fue mucho mejor que la noche inaugural (No hacía falta ser un genio) y el ventrílocuo-humorista se llevó las palmas. Alguno, con alguna copa de más se puso a discutir…”Ehhh, usted, no le da vergüenza presentarse en público para hacer esa estupidez??” a lo que el ventrílocuo intentó defenderse…”Bueno, señor, trato de hacer lo mejor…” y de nuevo interrumpiendo el de la copa “¡¡¡Callate vos que le estoy preguntando al muñeco!!!”







Algunos nadadores tampoco salían del asombro. "Habla el chiquito o habla el grandote?"






El sábado la marea Azul-Celeste del CABA copó el recinto, quizá aún más que el día anterior, generando un Tsunami Rosarino. Más éxitos en el medallero.
Como frutilla de la torta, una posta mixta donde alguno se hizo pasar por “alguna”. Todos al agua, nado sincronizado, chapuzones post competencia y fotos varias.









Tirale pan o una pelota y vas a ver como viene el cardumen a la orilla





Saludos, despedidas, y en medio de celebraciones volvió a aparecer el flaco alto de barba, caminando sobre el agua, golpeó las palmas dos veces y en cuestión de minutos, no quedaba ninguna señal de la competencia.

Para el final, el mismo sábado a la noche, la Fiesta de Despedida y Premiación. Para entonces casi todos habían perdido la compostura, a alguno lo único que le faltó tomar fue “Conciencia”. Se aflojaron los conceptos, se relajó la imagen “Si Elen baila, yo también puedo!!”



El Equipo de fútbol también festejó (Que tiene que ver?)



Horas después, mientras varios pibes con escobas trataban de devolverle la forma al salón, la misma cantidad de autos que algunos días atrás habían copado la ruta 9 llenos de expectativas, volvía por la misma ruta, de nuevo a casa, ya no tan festivos y mucho menos expectantes. Rosario, que parecía tan lejano, ya había pasado.

La satisfacción continuaba…sin fecha de vencimiento…

Otra cosa...San Rafael, prepara el vino, que copas sobran.